Hacia atrás en el tiempo...
El vapor: del fuego y del agua nace la energía más antigua y natural, que acompaña desde siempre la evolución de la tecnología y de la industria.
De los medios de transporte a los generadores más potentes, el vapor ha recorrido un largo camino de investigaciones, descubrimientos emocionantes y aplicaciones atrevidas.
Nuestra larga historia es paralela a la historia del vapor.
De hecho, los orígenes de MINGAZZINI están profundamente arraigados en la Llanura Padana, donde se desarrollaron las primeras industrias de conservación de alimentos, industrias lacteas y donde, consecuentemente, nació la necesidad de introducir el vapor en los procesos industriales. En los principios del ’900 la industria agroalimentaria, en particular del tomate, estaba experimentando una aceleración marcada de su desarrollo, precisamente en la provincia de Parma, desarrollo que ya había comenzado en los últimos años del siglo anterior. En la misma zona de Parma, junto con Reggio Emilia y Módena y siempre en los principios del ’900, se difundió el calentamiento a vapor en las queserías de queso Parmesano (anteriormente, se utilizaba el calentamiento con fuego directo). Por lo tanto, en ese periodo específico se crearon las condiciones especiales para el desarrollo industrial de un área que hoy en día es conocida a nivel internacional como el «Food Valley» italiano.
Ubaldo Mingazzini, nacido en 1896, trabajaba en Parma, en los talleres de mantenimiento de trenes (obviamente, de vapor). La experiencia y la capacidad técnica adquirida con las locomotoras de vapor se convirtieron en una oportunidad única para acceder a las actividades de la industria mecánica: trasladar la tecnología del vapor a las instalaciones fijas como soporte para la industria alimentaria. En 1929 se probaron los primeros generadores, realizados utilizando solo la tecnología de unión con clavado (la soldadura se introduciría, gradualmente, después de la segunda guerra mundial). Hoy en día, en la zona de acceso del establecimiento se puede admirar uno de los primeros generadores, número de matrícula PR 3158, probado el 12 de julio de 1929.
Así, lentamente y con voluntad y perseverancia, comienza la historia de MINGAZZINI. Una historia paralela a los acontecimientos y al desarrollo industrial del país, con momentos trágicamente difíciles y otros de gran entusiasmo e ímpetu para la reconstrucción y la recuperación. Para MINGAZZINI, los años sesenta representan el paso fundamental de empresa artesanal a empresa plenamente industrial. Al frente está Domenico, que da la forma a la fábrica donde hoy aún opera MINGAZZINI y completa su expansión. En esos años, también comenzaron las primeras exportaciones hacia los mercados extranjeros. Este proceso se consolidó durante los años setenta y, sobre todo, ochenta y en los principios de los años noventa. En este periodo, MINGAZZINI se dedicó a la producción de generadores aún más potentes, ofrecidos en mercados de salida tanto a nivel de producto como a nivel geográfico, siempre más extensos y diversificados.
Las primeras pruebas
Generador de vapor
Número de matrícula: PR 3158
Probado: 12 de julio de 1929
Rumbo al futuro...
Mingazzini es una empresa familiar que mantiene inalterados sus valores y el orgullo de la marca y los transmite de generación en generación.
Estos valores, combinados perfectamente con la actualización tecnológica y la innovación, a lo largo del tiempo han convertido Mingazzini en una empresa moderna que ha continuado a prestar la máxima atención al cliente.
A pesar del constante y continuo crecimiento desde el punto de vista tecnológico, tanto a nivel de producto como a nivel de proceso, Mingazzini no ha perdido de vista su objetivo original. Análisis profundo de las necesidades del cliente, respuestas personalizadas y máximo cuidado de los detalles. Todo esto representa una cultura, una flexibilidad y una creatividad que han hecho famoso el «Made in Italy» en todo el mundo. Al igual que un traje de sastre, en Mingazzini cada sistema está diseñado con cuidado y está realizado con precisión y experiencia.
Nuestra historia y experiencia nos ha conducido a producir generadores de vapor, calderas de agua caliente y sobrecalentada, calderas de recuperación, acumuladores de vapor, intercambiadores y desgasificadores estudiados detalladamente y diseñados a medida para las nuevas necesidades industriales, siempre más exigentes, como el ahorro energético, el respeto del medioambiente, la posibilidad de gestión y control modernos y eficientes de los sistemas.
Para satisfacer estas necesidades, MINGAZZINI ha mejorado continuamente sus productos y ha obtenido rendimientos siempre más altos, gracias a la reducción de las dispersiones térmicas y a la introducción de dispositivos para la recuperación de energía. Como resultado, se han obtenido generadores con eficiencia efectiva hasta el 98,5 %. Además de estos productos, hoy MINGAZZINI puede proporcionar todo lo que sea necesario para la realización y la gestión moderna y eficiente de las centrales térmicas de cualquier dimensión, incluyendo el control y la gestión a distancia, así como conjuntos capaces de funcionar sin supervisión continua durante 24/72 horas.
El compromiso para el futuro sigue siendo el mismo: aumentar la lealtad del cliente a nuestros productos, con las mejores soluciones tecnológicas y garantizando seguridad, calidad, seriedad y servicio según el estándar «Mingazzini».
Estamos inspirados por la vocación familiar que transmite, de padre a hijo, un secreto antiguo como el ser humano:
la fuerza del vapor que corre hacia el futuro.